domingo, 13 de septiembre de 2015

FUIMOS BREVES


FUIMOS BREVES

(BennyOnisso_20150905)

Fuimos breves, breves en un suspiro,
en un atisbo de locura que llenó el vaso,
fuimos breve como el vuelo de golondrina
que pasa fugaz por los ojos del mundo furtivo.

Fuimos un segundo
entre la razón y el desquicio,
un disparo a quemaropa,
que me dejó sin manos, que me dejó sin juicio,
poseyendo el infortunio de esta prosa.

Fugaces, breves, intensos,
una hoguera de amor repleta,
un hechizo y un encanto envueltos de deseo,
fuimos un bosquejo,
difuminado allá en la niebla,
en la distancia y en el destierro de la espera.

Fuimos boceto de unos días venideros,
de un mar embrabecido
y también de un lejano desierto,
fuimos breve en la letra,
en la pauta, en los versos, en la tregua.

Finalmente fuimos nada
pues el universo y la luna llena,
aparece en mi ventana,
y tú no estás conmigo en ella.

Fuimos nada, una ola brava y prodigiosa,
llena de suspiros y dueña de una playa ajena,
sólo tus ojos bellos que me hablaban desde tu estancia,
y yo desde mi nostalgia queriéndote cerca.

Fuimos breve en la voz,
que ahora se pierde en la lejanía,
y en esta madrugada fría,
en que no estás a mi lado dándome calor,
porque sólo fuimos del amor, una premisa.

No fuimos piel ni fuimos danza,
fuimos miel y añoranza,
fuimos música, algarabía, fuimos un ancla;
fuimos tu voz y mi voz
en un océano de palabras.

Fuimos un adiós en silencio y sin mancha,
una canción al amanecer que quedó silenciada,
un verso y un bosquejo de un amor sin alas,
un destello en unas tardes de miradas vagas.

Fuimos marcha y calma,
fuimos prisa de un acorde que rebasó mi alma,
fuimos eso en unos segundos antes de la batalla
entre tú y yo librada, en que quedamos con nada.

Fuimos breves apesar de tu voz,
que me habló mil horas,
apesar de la compasión que inundó a mi corazón
y dejó que rompieras mi aurora.

Fuimos destiempo, fuimos abandono,
y yo sentí mis manos cansadas
de acariciar tu ausencia sin rostro;
fuimos mi locura de perseguir tu trémula existencia,
y tú, esa triste canción que suena y suena.

Fuimos una  historia contada al medio día,
unas madrugadas  de pasión encendida
de abril y de agosto;
fuimos el amanecer de las horas en  un sorbo,
de momentos gráciles y de mis huesos devotos,

Fuimos tu boca florecida que me inundó de embrujos allá en la huerta;
fuimos todo lo posible y todo lo alcanzable antes de que partieras,
antes de que yo supiera,
que no eran para mí tus ojos,
ni podría yo seguir recibiendo tus besos sosos.

Fuimos breves, una alegoría y un adiós sin señuelo,
tu devoción y mis desvelos envueltos en violines y guitarras sin consuelo,
y tus manos de compasión para mi desolada huella;
fuimos el eco de tu nombre y el mío sembrados en la tierra,
mi beso y tus ojos tiernos en mi ventana a fines de enero.

Fuimos festejo y derroche en mi mesa, a la hora de la cena,
una tersa melodía en los oídos y en las venas,
un delicioso vino servido y en reposo, para una inusitada fiesta;
luciérnagas eternas,  brillando en la noche como quimeras...

TODOS VINIERON A VERTE VIEJITA

                        (Bennyonisso _ 20220405) Todos vinieron a despedirte amada abuelita, te trajeron flores, cánticos y rezos, silencios...